“Arturo“, un oso polar que vive en Argentina en el Zoológico de Mendoza, triste y solo, razón por la cual activistas y protectores de animales temen por la vida del oso, ya que se encuentra en condiciones inadecuadas para su especie.
Arturo durante 20 años ha soportado temperaturas arriba de los 60º Fahrenheit y con espacios limitados en su hogar en el Zoológico y el único compañero que tenía, “Pelusa” otro oso polar falleció.
Varios han sido los esfuerzos por reubicar a Arturo, solicitando trasladarlo al Centro Internacional de Conservación del Oso Polar en Canadá, pero al no poder el Zoológico de Mendoza aportar la documentación necesaria, fue imposible.
María Fernanda Arentsen, profesora canadiense aseguró para The Daily News:
“Arturo está en una jaula pequeña, sin espacio para caminar, él no recibe ningún estimulo, y el clima es terrible para un oso polar”.
Ante tal situación, Greenpeace tomó el caso y a través de internet se han recibido más de 150.000 firmas para enviarlas a la presidenta de Argentina para conseguir el traslado de Arturo.