Las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte en todo el mundo, y la pregunta de qué podemos hacer para reducir tan terrible estadística sigue teniendo una respuesta clara y contundente: adoptar una vida saludable.
Y parte de la adopción de una vida saludable contempla la posibilidad de tener un perro ¡Sí, tener un perro parece que ayuda a reducir esta mortalidad cardiovascular! Un estudio realizado en la Universidad de Uppsala (Suecia), concluyó que las personas que tienen un perro poseen un riesgo notablemente inferior de desarrollar una de estas patologías y, lo que es incluso más importante, de morir por cualquier causa (cardiovascular o no).
Mwenya Mubanga, director la investigación publicada en la revista “Scientific Reports” dice: “un hallazgo muy interesante de nuestro estudio es que tener un perro se mostró como un factor especialmente protector en las personas que viven solas. Un aspecto a tener en cuenta dado que ya se sabe que la población que vive sola tiene un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y muerte. Así, quizás los perros sean un importante miembro de la familia en los hogares unifamiliares”.
En el estudio, se analizó la evolución entre 2001 y 2013 de más de 3,4 millones de adultos suecos que, con edades comprendidas entre los 40 y los 80 años, no padecían ninguna enfermedad cardiovascular en el momento de su inclusión en la investigación. Para ello solo recurrieron a sus historiales médicos.
Por otra parte, la ley sueca establece desde 2001 la obligatoriedad de ‘censar’ a todos los perros y de identificar a sus dueños. Así llegaron al resultado de que tener un perro influye sobre el riesgo cardiovascular y de mortalidad de una persona. Y de acuerdo con los resultados, muy especialmente en el caso de las personas que viven solas.
“Nuestros hallazgos mostraron que los dueños de un perro que vivían solos tenían, frente a sus homónimos no propietarios, un riesgo un 11% inferior de enfermedad cardiovascular y hasta un 33% menor de mortalidad general”, cuenta Mwenya.
Por ser un estudio observacional, no hay conclusiones del tipo ‘causa y efecto’ sobre por qué los perros aumentan la longevidad, pero los autores tienen varias teorías al respecto. La co-autora Tove Fall dice que este tipo de estudio “busca asociaciones en grandes poblaciones, pero no responden a la pregunta sobre cómo los perros pueden proteger frente a la enfermedad cardiovascular. Sabemos que los propietarios de perros tienen por lo general un mayor nivel de actividad física, lo que podría explicar nuestros resultados. Otras explicaciones aluden a un incremento del bienestar y del contacto social”.
Así que tener un perro en casa podría ayudarnos a vivir más años y con mejor salud. Ya ves, tener a un hijo perro no solo lo hace feliz a él, sino más longevo a ti.
Fuente: ABC