Frida, un miembro de la marina mexicana, es una perra labradora de 7 años que ha detectado la presencia de más de 50 personas tras el último terremoto en México.
Después del más reciente terremoto de magnitud 8,1 ocurrido en México, Frida localizó el cuerpo de un oficial de policía en Juchitan. Sus encargados esperaban que Frida olfateara a más sobrevivientes del temblor.
De hecho, el día del terremoto, Frida fue enviada a la escuela Enrique Rebsamen, donde los trabajadores de emergencia encontraron a 11 niños vivos. Pero 25 personas, entre ellas 19 niños, ya habían perdido la vida.
Un tweet de la marina mexicana logró más de 4.000 retweets y casi 7.000 me gusta, con gente que aclamaba a Frida como una heroína, y ofrecían enviarle botas para mantener sus patas seguras.
Otros 14 perros también fueron desplegados por toda Ciudad de México para buscar gente desaparecida. Evil también forma parte del Equipo de Búsqueda y Rescate (BREC), además de realizar acciones de rastro de narcóticos y explosivos, así como otros perros como Ecko, Kublay, Nala o Titán.
“Los perros son una herramienta que no tienen sustituto tecnológico ni de otro tipo por su capacidad de trabajo y la relación tiempo-resultado. Es el elemento de búsqueda que menos tiempo tarda en encontrar víctimas con mayor efectividad”, explicó Susana Izquierdo, presidenta de la Escuela Española de Salvamento y Detección con Perros.
El entrenamiento que permite que perros rescaten personas en zonas de desastre los prepara para trabajar en un entorno antinatural y agresivo, tanto en el aspecto físico como psicológico, explica Susana. De hecho, la efectividad de los canes en labores de rescate se basa en su capacidad de olfato, la cual es 500 veces mayor que la de las personas.
Una muestra de cómo los perros no solo son una compañía emocional para los humanos, sino que también pueden salvar vidas en los peores momentos.
Fuente: Hipertextual y New York Post