Los científicos han descubierto una superposición cromosómica entre perros y humanos que podría explicar por qué los perros son nuestros mejores amigo.
Un nuevo estudio publicado en Scientific Advances, encontró que los perros tienen algunas mutaciones genéticas similares a las de los seres humanos, más específicamente relacionadas con el síndrome de Williams-Beuren. Uno de los síntomas de este trastorno es la absoluta ausencia de inhibición social, lo que hace que una persona sea muy confiada y extrovertida.
Bridgett vonHoldt, una de las autoras del estudio, observó estas similitudes en un estudio de 2010 y probó la teoría ejecutando una serie de pruebas de comportamiento en 10 lobos y 18 perros. Los investigadores colocaron a los animales en una habitación con una caja de rompecabezas que contenía un pedazo de salchicha, para que la buscaran primero por sí mismos y luego junto a un humano. Los lobos fueron directamente a la salchicha en ambos casos, pero los perros no podían enfocarse en la salchicha si un humano estaba en la habitación.
“Lo que realmente ehacían era mirar al humano. No les importaba la tarea, sólo estaban interesados en la persona”, explica Bridgett.
La investigación es parte de un estudio más amplio que trata de averiguar exactamente cómo los perros evolucionaron de los lobos, y cómo llegó a ser domesticado. El equipo reconoció que la muestra de animales era pequeña y que se necesitan más investigaciones antes de determinar qué significa exactamente este nuevo hallazgo.
“No hemos encontrado un ‘gen social’, sino un importante componente genético que configura la personalidad animal y ayudó al proceso de domesticación de los perros”, afirmó Bridgett.
Fuente: New York Post