Hace doce años, una elefante huérfana llamada Galana llegó al refugio David Sheldrick Wildlife Trust (DSWT). Estaba débil y asustada en la frontera del Parque Nacional de Tsavo en Kenia, pues había perdido la huella de su madre que probablemente habría sido asesinada por cazadores.
Con la ayuda de DSWT, Galana creció y en 2011 volvió a su hábitat natural. Hasta ahora ha vivido con una manada de elefantes dirigida por otra ex huérfana llamada Yatta.
Galana puede ser un elefante salvaje, pero visita periódicamente las instalaciones de DSWT cada dos meses junto a su manada. Pero en su más reciente visita a la Unidad de Reintegración Ithumba, descubrió una gran sorpresa: tendría un bebé.
“Los elefantes estaban tan emocionados por la llegada del nuevo bebé, que celebraron haciendo una sinfonía con sus trompas. A lo largo del día Galana se rodeó por ex huérfanos y elefantes salvajes por igual, que asumieron el papel de niñera con Gawa (el nombre de la pequeña elefante)” afirma DSWT en un comunicado.
El equipo de DSWT bautizó el bebé de Galana “Gawa” porque significa “compartir” en swahili. “Estamos contentos de ver Galana vivir la vida que se merece y disfrutar del mágico hecho de ser madre por primera vez. Estamos orgullosos de haberle dado una segunda oportunidad después de que ella se quedara huérfana. Ahora Gawa también estará segura” expresó un representante del refugio.
“Esperamos que Gawa viva una vida larga y feliz, libre de amenazas y daños, y que un día se convierta también en madre, que estará segura bajo la protección de nuestro equipo en todo el terreno”
Fuente: The Dodo
