A menudo, los animales son utilizados para terapias de apoyo emocional a humanos debido a su dulzura, amor y ternura. Y es que los animales tienen un sentido de normalidad y responsabilidad que ayuda a las personas que sufren de cáncer, depresión y trastornos de la alimentación. Ese es el caso de una chica que cuenta cómo su perro la ayudó a superar sus desórdenes alimenticios.
“Las vacaciones de invierno se acercaban. El estrés del trabajo y la escuela se vinieron encima de mí y todos los hábitos alimenticios saludables que había adquirido durante los últimos dos años desaparecieron. Recaí en la anorexia restrictiva. Mi peso se redujo entre 10 y 15 libras, y mi régimen de ejercicios estaba en su punto más alto: de dos a tres horas al día.
A veces pensaba en cómo me había sentido feliz en los últimos 13 años de batalla contra la anorexia. Vinieron a mi mente los recuerdos de cuando montaba a mi caballo. Él nunca se preocupó por mi peso y mi obsesión por la perfección en la vida no era un problema.
Por eso decidí que era hora de volver a tener amor incondicional en mi vida, pero esta vez en forma de cachorro. Un pastor alemán negro con pelos blancos en su pecho y sus dulces ojos llamaron mi atención. Así acepté que la pequeña Jezebel entrara en mi vida.
Las mascotas son uno de los mayores ejemplos de la vulnerabilidad. En la mayoría de los casos, van a morir antes que sus amos. Sin embargo, los padres de perros se enamoran de ellos y tienen un profundo sentido de la protección. Fue así como el cuidado de Jezebel se convirtió en la forma de cuidarme a mí misma.
Todos los días tenía que comer tres comidas, así que nos sentábamos juntas a comer. Aprendí a tener paciencia con ella, y al mismo tiempo conmigo misma. Varias veces a la semana comento todo a mi terapeuta, y me comenta sobre cómo mi perro aumenta mis posibilidades de una recuperación completa.
Todas las mañanas, Jezebel se come todo su plato de comida, y yo me siento a comer mi cereal. Los hacemos juntas. Y aunque la recuperación tarda mucho tiempo, también es un acompañamiento al entrenamiento de mi perro.“
Fuente: The Dodo
Fotografía principal: bullcitydogs Licencia CC 2.0