Definitivamente nuestros perros ocupan gran parte de nuestras conversaciones independientemente de si son o no de raza. Sin embargo, tener información de su raza es fundamental para poder darles una mejor vida y para poder tomar una mejor decision antes de tener uno. Te dejamos 10 cosas que no sabías de los labradores
1. Su origen es europeo. Existe la hipótesis de que sus predecesores provienen de la isla de Terranova ubicada al noroeste de Norteamérica en donde se les conocía como perros de St. John, utilizados principalmente para la pesca. Se dice que fueron importados a Inglaterra, en donde nace propiamente el nombre de labrador retriever en el siglo XIX. ¡Sean europeos o americanos, el labrador tiene lo mejor de los dos mundos!
2. También se les conoce como retriever porque llevan su presa al cazador. La palabra retriever significa cobrador. Cobrar quiere decir ir por la presa que ha sido abatida y entregarla al cazador. Teniendo un labrador en la ciudad, no debe de preocuparnos si de vez en cuando va a cobrar pantuflas o peluches ¡puede ser su instinto!.
3. Los primeros labradores eran de color negro. Actualmente el labrador color amarillo se considera el más común pero originalmente el labrador era de color negro. Al parecer, en 1899 apareció por primera vez, de padres negros, uno labrador amarillo. ¡Quién lo hubiera pensado! Ahora incluso tenemos color miel, blanco, chocolate y gris.
4. Disfruta trabajar y ayudar a la gente.El labrador ha tenido gran popularidad en trabajos filántropos como la protección civil y en la salvación de personas en el agua. También, es considerado un gran perro lazarillo, utilizado para ayudar a personas con capacidades diferentes por ser sumamente fiel y entendido con los humanos.
5. Le gusta recibir y dar apapachos. A diferencia de otras razas que guardan su distancia, el labrador es un perro muy amoroso. Esta cualidad la demuestran con mucha exuberancia y vitalidad ¡hasta el punto que de vez en cuando hay que ayudarlo a controlar sus impulsos!
6. ¡Cuidado con dejarlos solos mucho tiempo! Los labradores son perros muy activos que se aburren fácilmente. Dejarlos solos puede llevar a un comportamiento destructivo e indiciplinado al no estar lo suficientemente estimulados mental y físicamente. Recuerda: dejarlos solos por mucho tiempo es una forma de abandono.
7. ¡Le encanta aprender! El labrador es un perro sumamente listo y le gusta aprender cosas nuevas. Es recomendable educarlo para que conozca las reglas de convivencia y que todos los miembros de la casa compartan el mismo lenguaje con él. Educar al perro es educar a la familia.
8. ¡Son comelones! Los labradores siempre tienen hambre. Basta tener uno o ver la película de Marley y yo para saber que siempre están dispuestos a comer. Por lo mismo pueden padecer de sobrepeso fácilmente si no se mantiene una dieta adecuada. La obesidad tiene concecuencias como la diabetes y problemas en las articulaciones, ¡no te dejes manipular por su expresión hambrienta!
9. ¡Les encanta ir de paseo!. El labrador muestra una buena disposición para viajar en automóvil. Aman ser parte de nuestras actividades pero hay que mostrarles la mejor manera de hacerlo para no arriesgar la vida de nadie y también ¡nunca! dejarlos solos en un coche estacionado.
10. Son propensos a sufrir de problemas en ojos y oidos. Una vez más, ¡cuida su alimentación! Los labradores también pueden padecer de alergias que afectan zonas sensibles como los ojos y oídos.
FUENTE: Ginoulhiac, Luisa. El labrador. Colección perros de raza. Barcelona: Editorial De Vecchi, 2006.