No cabe duda que nuestros hijos perros son como niños chiquitos y está perrita Pastor Alemán lo dejó muy claro al ponerse a llorar por no quererse ir del lago… si, así como lo lees.
Bella, se divertía tanto en el lago que cuando su dueña le dice:
“Bella, es tiempo de irnos, sal ya del agua”, la Pastor Alemán comienza a llorar y chapotear en el agua y mientras más le es pedido que salga, más entra en el agua y llora.
¡Súper tierna!