En este reportaje se da la noticia de un perro callejero en San Benachi, Italia, que es recogido de la calle por una anciana llamada Marya. Tomy acompaña a su nueva ama en sus quehaceres rutinarios y a misa todos los días.
A los parroquianos y al cura no les molesta, Tomy solo se acuesta a lado del cura y observa.
Después de un tiempo la anciana muere y Tomy queda otra vez en la calle; las amistades de Marya cuentan que Tomy sin ayuda ni dirección de nadie llega al funeral, y que diariamente va a misa con el aviso del campanario.
A los parroquianos y el cura no les molesta, Tomy solo se acuesta a lado del cura y observa. Por su lealtad a Marya el pueblo ha adoptado a Tomy y no le falta nada. En recuerdo de todos los perros que te han expresado cariño las palabras de Lord Byron
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