Algo que nos cuesta mucho trabajo aceptar es que nuestro hijo perro viva muchos menos años que nosotros, el hecho de saber que eventualmente le tendremos que decir adiós, nos causa un gran hueco en el corazón. Pero pareciera que hay una esperanza de retardar este proceso.
Científicos que estudian todo lo relacionado con la edad, están realizando un estudio con 20 perros. Estos perros, todos de casa, son mayores de 6 años y están siendo estudiados con una medicina llamada Rapamycin. Aunque todavía no entienden del todo el funcionamiento de esta medicina, si saben que se ha usado desde hace años para prevenir el rechazo en órganos transplantados y extendiendo la vida de diferentes especies como gusanos, mosquitas de la fruta y ratones.
Cuando uno envejece, las células de nuestro cuerpo se van degradando, dañando el ADN y las proteínas contenidas en el organismo. Esta degeneración no se puede detener, pero los estudios han encontrado diversas maneras de alentar el proceso.
El factor común que encuentran es en la restricción de calorías, si se reducen, una serie de cambio biológicos pueden cambiar al cuerpo cambiando el patrón a supervivencia y por ende retardando el proceso de envejecimiento, y esto es lo que está ocasionando Rapamycin, emulando ese cambio biológico.
David Sinclair, investigador de la escuela de medicina de Harvard, comenta que el truco es “engañar al cuerpo” haciéndole creer que se está quedando sin energía, para que ponga más esfuerzo en su sistema de supervivencia.
Por ahora, la vida que Rapamycin ha logrado extender es la de lo ratones, entre un 9% y 14% más. Por otro lado, también ha prevenido daños cardiovasculares y pérdida de la memoria.
Aunque la esperanza de tener una vida más larga está creciendo, todavía falta mucho camino por recorrer antes de poderla usar en nuestros hijos perros, muchos detalles como la dosis y la edad en la que se tendría que administrar, por ahora tendremos que esperar entre 4 y 5 años para saber si estos perros que están siendo medicados, lograron retardar el proceso natural de envejecimiento.
Es importante destacar que estos científicos están siendo muy cuidadosos en este estudio, ya que lo principal para ellos es no lastimar a los perros que están en tratamiento.
¿Qué piensas? ¿Le darías esta medicina a tu hijo perro?
Fuente: Mashable – Celine Nadeau Licencia CC 2.0